Mira sí, soy un chico de promesas incumplidas pero no es algo nuevo, me lo he propuesto muchas veces, sí, lo sé. Hice cosas horribles pero como cualquier enamorado supongo. Cambié tantas veces que ya no sé ni quien soy, he besado mil labios y aún no me imagino como serán los tuyos: te usé de molde para mi prototipo ideal.
Lloré tanto que no tengo lágrimas, y lo tapé tanto que ahora no sé ni donde tengo el corazón.
Una vez probado todo eso me niego a seguir teniéndote en mi cabeza, a depender de una persona que no se merece ni mi sonrisa, a seguir siendo un tonto cobarde que no es capaz de hacer su vida, quiero dejar de sentirme una mierda cuando te veo y de dejar esa impotencia de: joder, ¡quiero pero no puedo !
Ya no quiero finales felices ni historias de amor, no quiero ser el centro de tu corazón ni siquiera esos besos de buenos días, tampoco pasar el día entero en la cama, aunque tampoco lo esperé nunca, me conformaba con ser tu centro de atención diez minutos o una mirada, así era feliz pero ya ni eso, no quiero saber nada más de ti, ¡joder! quiero dejar de soñar contigo. No quiero volver a ser un corta-venas otra vez.
¿Empezar de cero? No, quiero avanzar desde el puto punto donde llevo estancado años y eso no puedo hacerlo contigo en mi mente. No quiero ser un juguete roto ni un hombre frío, quiero ser el que te mire a la cara y te diga: jódete soy feliz y no te necesito.
Me arruinaste la vida, pero no te preocupes ya no vas a tener que aguantar más mis semanas bipolares, ni mis lágrimas ni mis "te quiero" cuando estoy borracho, eso sí, algún día descubrirás que soy maravilloso y que no vas a encontrar nunca a nadie que te quiera como yo.